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¿Tu hijo no rinde en la escuela de acuerdo con sus capacidades y esfuerzo realizado? ¿Se dispersa o pierde la atención con facilidad? El 80% de la información sensorial que llega a nuestro cerebro lo hace por vía visual, pero ver bien no es sinónimo de comprender lo que vemos.

Para mejorar el rendimiento escolar el objetivo de la Terapia Visual es entrenar todas las habilidades que están involucradas en el aprendizaje. Para poder leer el cerebro tiene que coordinar los dos ojos, converger para mirar los libros y divergir para atender a la pizarra, enfocar el texto de cerca y de lejos, mover los ojos con harmonía para no saltar letras, palabras o líneas. Necesitamos unas habilidades perceptuales eficaces para entender lo que aprendemos y también necesitamos integrar todas las habilidades citadas con el sistema auditivo y con el sistema motor para mejorar el procesamiento de la información visual.

Lateralidad

La lateralidad diestra o zurda se refiere al hemisferio dominante que organiza la entrada y salida de los códigos de comunicación (palabras, letras, nombres) y al lado del cerebro que controla el movimiento de la pierna, mano, oído y ojo dominante.

Una lateralidad bien establecida nos permite orientarnos en unas coordenadas espacio- temporales y ordenar la información para procesar correctamente las letras y los números.

Alrededor del 20% de la población no tiene la lateralidad bien desarrollada y presenta, entre otras, lateralidad cruzada o inmadura a la vez que:

  • Dificultades de coordinación del cuerpo
  • Problemas en reconocer la derecha y la izquierda
  • Inversión de letras, palabras o nombres
  • Escritura en espejo o de derecha a izquierda
  • Dificultad en las matemáticas

Los niños con estos síntomas suelen presentar dificultades de aprendizaje que a veces puede confundirse con déficit de atención. En los adultos, dificultades de orientación en un mapa. 

 

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